Sabiendo cómo funcionan las plataformas de screening, en esta oportunidad ahondaremos en los medios adversos como parte crucial de la debida diligencia. Partiendo de la premisa de que a mayor falta de información del cliente, mayor riesgo se presenta y por ende, más consecuencias negativas se vislumbran, los medios adversos son una poderosa herramienta para mitigar esto.
Un medio adverso, desde el punto de vista del Compliance, incluyen acusaciones halladas en fuentes informativas con suficiente acreditación, así como en publicaciones que puedan relacionar a una persona con una entidad, ligándola como un tercero y como consecuencia, ser objeto de sanciones.
Cabe diferenciar, que un medio informativo no es sinónimo de un medio adverso; podríamos clasificar la información adversa como información relevante para determinar el riesgo al que se enfrenta un cliente y que no es conocida por la mayoría de la población.
El screening de medios adversos varía en sus requerimientos entre los distintos países, fundamentándose en sus legislaciones nacionales, políticas y factores sociales. También se condicionan en la reputación, asuntos sociales y de gobernanza (ESG).
Y, lo más importante y sobre lo cual versa este tipo de screening, es hallar si la conducta alegada es cierta o puede aumentar de manera determinable el riesgo de la empresa involucrada de forma involuntaria en distintas tipologías penales o sanciones administrativas. Para que converjan estos supuestos de hecho, debe existir un nexo causal entre la presunta conducta hallada en los medios adversos a través de la plataforma de screening y el riesgo potencial que representa al cliente.
Para lograr la total efectividad de los programas de screening en medios adversos, la clave es la combinación entre tecnología difusa de cotejo de datos. Por ejemplo datos como fecha de nacimiento, género, lugar de nacimiento, es mucho más eficiente que cualquier proceso manual, y que si bien la rectificación sigue siendo necesaria, a menudo puede ser realizada de manera rentable por los analistas de nivel 1.
Además, resulta imprescindible que las organizaciones se mantengan actualizadas a nivel mediático en cuanto a los delitos financieros que puedan relacionarse con las actividades de sus clientes. Como mencionamos antes, la era de la información no significa que sea información de pleno acceso a todo público y utilizar una herramienta de screening con capacidades de última tecnología como la IA, puede significar la prevención de riesgos importantes.